
Cristina Martínez
“Un profesor debe ser cercano a los alumnos para poder «conectar» con ellos y que le sientan cerca. Para mí, esta profesión es un acto de generosidad, donde el profesor da todo lo que tiene, su sabiduría y experiencia, e intenta educar al alumno en todos los aspectos, tanto humano como intelectual. Los entiende y escucha, e intenta posicionarse en sus inquietudes para poder ayudarles de la mejor forma posible. Da lo mejor de uno mismo y enseña siempre con una sonrisa, para proporcionarles confianza en ellos mismos y en sus logros»
